Tras registrar fuertes subidas en 2019, está previsto que el precio de los viajes sufra una desaceleración en 2020.
Según la sexta Previsión Global para el Sector de los Viajes 2020 de CWT y GBTA, las tarifas aéreas subirán un 1,2 %, y las de hoteles y coches de alquiler un 1,3 % y un 1 % respectivamente.
Si bien la marcha de la economía mundial es en general positiva –con un crecimiento previsto para 2020 del 3,6 %, existen distintos factores que amortiguarán la subida de los precios.
“Los riesgos y la ambigüedad han aumentado en los últimos meses avivados por la amenaza inminente de las guerras comerciales, el impacto del Brexit, los posibles problemas de suministro de petróleo y la creciente probabilidad de una recesión”, señaló Kurt Ekert, presidente y director ejecutivo de CWT.
“Esta previsión ayudará a los compradores de viajes a tomar las decisiones correctas en un entorno cada vez más desafiante”, añadió.
Elaborado por CWT, la plataforma de gestión de viajes B2B4E, y la Global Business Travel Association, voz de la industria global de los viajes de negocios.
El informe Previsión Global para el Sector de los Viajes 2020 utiliza los datos generados por CWT Solutions Group, la división de consultoría de CWT, para ofrecer un anticipo de las tendencias y desarrollos que darán forma a la industria de los viajes de negocios el próximo año.
“Los avances tecnológicos y un panorama económico y político cada vez más volátil en todo el mundo han cambiado la forma actual de trabajar de los responsables de compra de viajes”, dijo Scott Solombrino, COO y director ejecutivo de GBTA.
“Este pronóstico anual proporciona información sobre los factores clave que impulsan estos cambios en las prioridades y ofrece una hoja de ruta para que los responsables de compras de viajes puedan empezar a planificar sus programas de viajes de 2020”, apuntó.
Latinoamérica
La actividad económica en Latinoamérica sigue creciendo, aunque más lentamente de lo previsto, y se espera que aumente un 2,5% en 2020.
Una situación política y económica volátil en algunas de las economías más grandes como Argentina, México y Brasil pondrá en riesgo las previsiones.
En el caso de México específicamente, si continúa la tensión con EE.UU. y se llegarán a imponer tarifas arancelarias, los viajes de negocios sufrirían un impacto negativo.
Aéreo: debido a las largas distancias, al crecimiento de la clase media y a la baja penetración en el mercado del transporte aéreo, existen numerosas oportunidades, y las compañías aéreas están aprovechándolas al máximo.
Desde 2017, han irrumpido en el mercado varias aerolíneas nuevas y las de bajo coste han incrementado su cuota de mercado de forma significativa en Brasil, México y Colombia.
Hotel: tras un declive constante en el número de hoteles de nueva construcción desde el pico de 2015-2016, las cosas podrían estar mejorando, con México a la cabeza.
En el primer trimestre de 2019 se abrieron 11 nuevos establecimientos en la región, y está previsto que el crecimiento continúe a lo largo de 2020.
Es probable que el precio del alojamiento, tanto en México como en el resto de Latinoamérica, siga bajando.
Transporte terrestre: el ligero aumento de la demanda de coches de alquiler está impulsado por un incremento de la misma en Brasil, la economía más grande de la región.
Las empresas de alquiler de coches avisan del cambio cultural que se está produciendo –coches compartidos en lugar de en propiedad– y el crecimiento del turismo también está impulsando el sector.
Norteamérica
Si bien la economía de EE.UU. está prosperando, la incertidumbre está creciendo debido a los aranceles y a las guerras comerciales.
El crecimiento del PIB de EE.UU. se reducirá al 2,1% en 2019, y lo hará aún más en 2020 y 2021 (al 2% y al 1,8% respectivamente).
Aéreo: se espera que el precio de los vuelos aumente arrastrado por las potentes economías de EE.UU. y Canadá, incluso teniendo en cuenta la disminución de los márgenes a la que se enfrentan las aerolíneas.
Hotel: la industria hotelera ha experimentado un crecimiento lento, pero constante.
Una desaceleración gradual ayudará a que las tarifas vuelvan a la normalidad, corrigiendo los altos precios observados en algunas de las principales ciudades.
Las localizaciones con fuerte presencia de empresas tecnológicas como San Francisco, San José, Seattle y Vancouver siguen sufriendo aumentos.
Sin embargo, el que la demanda en estas ciudades haya sido alta durante tanto tiempo ha hecho que los precios subieran demasiado, lo que ha provocado que los viajeros de negocios se alojen más lejos.
Transporte terrestre: es poco probable que se observe un aumento de los precios hasta 2021 o 2022 debido a la naturaleza a largo plazo de los contratos.
Las preferencias de los viajeros están dictando un cambio, y los viajeros se están alejando de los sedanes tradicionales en favor de SUVs y camionetas más versátiles.
Europa, Oriente Medio y África
En España las tarifas aéreas subirán un 0,8% y las hoteleras un 1,9%, mientras que las medias globales se sitúan en el 1,2%, y 1,3% respectivamente.
El Fondo Monetario Internacional (FMI) prevé un crecimiento constante, que irá desde un 0,3% en Oriente Medio pasando por un 1,6% en Europa hasta alcanzar el 3,6% en África.
Aéreo: lo más probable es que el nuevo aeropuerto de Estambul, uno de los más grandes de la región, vaya a cambiar los flujos entre Europa y Asia ya que proporciona un punto de escala más accesible para los vuelos a China y Asia Oriental.
Hotel: Dinamarca y Egipto son dos países a tener en cuenta. Está previsto que los precios de los hoteles en Dinamarca bajen el próximo año.
En Egipto, sin embargo, las tarifas están subiendo, y se espera un incremento del 4,7 % a medida que su economía vaya asentándose tras un periodo convulso.
Transporte terrestre: el modelo de franquicia de Europa Oriental para los negocios de alquiler de coches experimentará un crecimiento ligeramente superior al 1,5%, debido a la oferta y la demanda de la región.
En cuanto al precio de las tarifas ferroviarias, este sigue experimentando grandes variaciones debido a la falta de consistencia en su regulación.
Asia Pacífico
La expansión de Asia se ha ralentizado debido al empeoramiento de las relaciones entre Estados Unidos y China, al endurecimiento de las condiciones financieras mundiales y a los desastres naturales.
No obstante, la región sigue siendo la más dinámica, con un crecimiento constante del PIB, una inflación benigna y un optimismo reinante.
Aéreo: los precios del petróleo son un indicador clave que afecta significativamente a las compañías aéreas.
Si el precio del combustible aumenta, las aerolíneas de bajo coste serán las más afectadas.
En la región de Asia Pacífico, el cierre en abril de las operaciones de Jet Airways, con sede en India, creó una brecha en el mercado para algunas rutas clave.
Esta reducción de la competencia ha hecho que las tarifas aéreas sean más altas, pero gracias a que otras aerolíneas han ido añadiendo capacidad para llenar el vacío, las tarifas han comenzado a normalizarse.
Hotel: la industria hotelera de Asia está en auge, y se prevé que el volumen de inversión hotelera tenga un crecimiento interanual del 15%.
Japón albergará la Copa del Mundo de Rugby a finales de este año, y los Juegos Olímpicos y Paralímpicos de 2020, algo que hará que suba el número de visitantes de la región.
El mercado hotelero japonés está experimentando un fuerte aumento de la oferta para dar cabida al esperado incremento del número de visitantes al país durante estos eventos.
Transporte terrestre: en China, una demanda estable y el aumento de la competencia perjudicarán a los proveedores de automóviles.
En toda la región de Asia Pacífico, los VTCs están en auge, y muchas empresas permiten a sus empleados utilizar estos servicios para viajes de negocios.